Con cinco pases de touchdown, Lamar Jackson protagonizó un encuentro que recordó sus mejores actuaciones y guió con maestría la contundente victoria de los Ravens frente a los Buccaneers. Baltimore se impuso con relativa facilidad en una contienda que inicialmente se anunciaba equilibrada, y el resultado final de 41-31 refleja perfectamente ese dominio.
Las dudas sobre si Lamar Jackson justifica su salario han quedado atrás. El quarterback se ha convertido en el corazón y alma de los Ravens, haciéndose indispensable. No solo lideró la victoria, sino que también se posiciona como uno de los candidatos al MVP, un galardón que busca conquistar por segundo año consecutivo.
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A pesar de la victoria, los Ravens sufrieron para conseguirla, con todo y Lamar Jackson quien no desistió en la ofensiva
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— Esto en Línea (@estoenlinea) October 22, 2024
Fue una jornada espléndida para Lamar, paradójicamente a través del juego aéreo, en lugar de su clásico juego terrestre. El mariscal mostró una gran precisión y una destacada elusividad al lanzar, ejecutando envíos de gran calidad. A pesar de que los Buccaneers lograron tomar una ventaja de 10 puntos en el primer cuarto, los Ravens encontraron su ritmo y no hubo quien pudiera detenerlos.
Jackson desencadenó una racha de 34 puntos sin respuesta del rival. Conectó dos pases de anotación al ala cerrada Mark Andrews, uno más al corredor Justice Hill y un potente lanzamiento al receptor Rashod Bateman.
La explosión ofensiva de Baltimore coincidio con un momento complicado para los Buccaneers, ya que Baker Mayfield tuvo un rendimiento cuestionable. El quarterback fue interceptado en dos ocasiones y se vio afectado por la lesión de su receptor Mike Evans.
¿Cómo fue el cierre del Ravens vs Buccaneers?
Fue en el último cuarto, cuando todo parecía decidido, que los Buccaneers intentaron apretar el marcador y lograron anotar. Baker Mayfield encontró algo de ritmo y lanzó dos pases de anotación a su corredor Rachaad White. También contribuyó el corredor Bucky Irving, generando un final mucho más ajustado de lo que se esperaba. Sin embargo, Baltimore logró controlar la reacción de los Buccaneers.
Con otro pase de Jackson hacia la zona de anotación, en esta ocasión a su corredor Derrick Henry, quien fue contenido durante gran parte del encuentro, pero se mostró decisivo al final con un acarreo de 80 yardas y un touchdown por recepción.
A pesar de la respuesta de Tampa Bay, la victoria de los Ravens nunca estuvo en duda, quienes ahora tienen un récord de 5-2, consolidándose como uno de los pocos equipos que podrían hacer frente a los invictos Chiefs. Los Buccaneers, quienes habían tenido una buena temporada hasta este momento, tienen un registro de 4-3, y se suma la preocupación por la salud de sus receptores principales, debido a la seria lesión de Godwin en los últimos segundos del partido, sumado a la lesión de Evans al inicio del juego.
